Capítulo 32

En el capítulo anterior...

Entre todos contaron y sacaron las cuentas, después de eso revisaron el talonario de las entradas y Antonio notó que algo no estaba bien.


Antonio: Acá hay algo que no coincide, el monto de dinero que tenemos es de 5.355, pero de acuerdo al total de las entradas vendidas deberíamos tener 5.950.


Pablo: ¿Pero qué pudo haber sucedido?


Antonio: Bueno, lo más lógico es que algunas de las personas que manipularon la caja antes de contabilizar haya sacado parte del dinero.


En ese momento automáticamente todos los ojos acusadores se fueron hacia Angie, incluido los de Pablo.


Angie: (molesta) ¿Qué? ¿Acaso piensan que yo fui capaz de robar el dinero? (todos guardan silencio).

*******

Antonio: Hija, no quise decir eso; me expresé mal. Perdón. A lo que voy es que tal vez lo pudiste haber sacado por error...

Jackie: (riendo) ¿Error? Primero dice que no había nadie, después que apareció la caja en el piso por arte de magia ¿y todavía pensas que es un error? Tío, deja de darle tantas vueltas y decile en su cara que es ¡una ladrona!

Angie: (viendo que Pablo en vez de defenderla la sigue mirando acusador) No lo puedo creer... (estalla en llanto y sale corriendo de la sala).

Después de la reacción de Angie la conversación se terminó y cada uno de los que estaban siguió en sus cosas.

Beto: Te desconozco Pablo...

Pablo: ¿Por qué?

Beto: ¿Cómo que por qué? ¿Te parece muy adecuada tu actitud con Angie?

Pablo: Tuvimos una discusión hoy en la mañana.

Beto: ¿Y por eso vos dejas que la humillen sin defenderla? 

Pablo: Es que también hay que reconocer que lo que dice Antonio es bastante razonable, porque ¿de qué otra manera se puede explicar la falta del dinero?

Beto: (molesto) Sos un bestia... Pensa que también pudo haber sido Gregorio o Leonardo, acordate que Angie dijo que primero no había nadie y después que la caja había aparecido sola ¿no te parece extraño? ¿de verdad desconfias así de tu esposa, de la futura madre de tu hijo?

Jackie: (sorprendida) ¿Qué futuro hijo? 

Pablo: (sin darse cuenta que el resto estaba escuchando lo que hablaban) Ehh... si, Angie está embarazada.

Jackie: ¿Osea que ya la preñaste?

Pablo: ¡Jackie! ¡Ya basta! ¡No voy a permitir que te refieras así a mi esposa! (toma su bolso y sale de la sala).

Antonio: (molesto) ¿Qué te pasa hija? ¡Te desconozco Jackie! ¡Esto no lo puedo tolerar!

Antonio y Beto salieron de la sala dejando sola a Jackie.


Jackie: (hablando por teléfono) ¿Dónde estás?


Leonardo: En tu departamento ¿cómo salió todo?


Jackie: Bien, nuestro plan salió a la perfección. La tarada de Angie ya quedó como ladrona y Pablo desconfía de ella.


Jackie hablaba muy tranquila con Leonardo sin darse cuenta de que Pablo tras la puerta escuchaba y grababa todo lo que ella decía, ya que después de lo que le dijo Beto reflexionó y recordó también que Jackie y Leonardo tenían turbios propósitos. 


Pablo: Otra vez más estos dos... ¿qué hice? Pobre mi Angie... Tengo que ir a buscarla ahora (se va).


*******



Leonardo: ¿Y? ¿Eso no te pone feliz? 


Jackie: Si...


Leonardo: ¿Entonces?


Jackie: Está embarazada.


Leonardo: ¿Quién?


Jackie: ¡Mi abuela fijate! ¡Angie! ¿Quién más iba a ser?


Leonardo: (riendo) ¡Que tierno! Si es nena le podrían poner Jacqueline...


Jackie: ¡Callate! ¡No seas bobo!


Leonardo: (sin para de reír) ¿Y? ¿Qué pensas hacer?


Jackie: ¿Hacer?


Leonardo: ¿No se supone que la odias porque seguis enamorada del tal Pablo?


Jackie: Si, pero ¿qué voy hacer si ya está hecho?


Leonardo: Siempre se puede hacer algo... siempre.


Pablo caminó rápido hacia su casa en búsqueda de Angie, sin embargo cuando llegó no la encontró . La llamó varias veces, pero ella tenía el teléfono apagado. Sin saber donde pudo haber ido quiso ir a la casa de Angélica para preguntarle si tenía noticias de ella.


Pablo: Angélica...


Angélica: ¿Qué queres?


Pablo: Yo se que actué muy mal y que merezco que ni usted ni Angie quieran verme, pero de verdad nose que me pasó.


Angélica: Eso no justifica todo el daño que le hiciste... y justo ahora cuando ella más te necesita. Acordate que ya no son solo amigos como antes, ahora están casados y van a ser padres por si lo olvidaste. 


Pablo: Nunca lo olvidaría...


Angélica: (interrumpiéndolo) Pero parece que si lo hiciste porque sino hubiera sido así mi hija no estaría tan triste y con el corazón destrozado.


Pablo: Angélica yo se que nada que diga va a justificar mi actitud, pero juro que de verdad estoy arrepentido y quiero hablar con mi esposa.


Angélica: No sab...


Angie: (con los ojos rojos, interrumpiendo y apareciendo por detrás de Angélica) Dejalo pasar mamá.


Angélica: ¿Estás segura?


Angie: Si...


Angie se llevó a Pablo a la terraza para estar más tranquilos y para hablar en privado.


Angie: ¿Y? (Pablo guarda silencio) ¿Qué querías decirme?


Pablo: Amor yo... 


Angie: ¿Amor? ¿Me amas? Yo ya pensaba que vos por mi ya no sentías nada.


Pablo: No digas eso, sabes que sos todo para mi.


Angie: Tu actitud de hoy me dijo todo lo contrario.


Pablo: Yo siempre supe que vos no habías sido (Angie intenta interrumpirlo) Por favor dejame terminar... Yo te conozco y se que tipo de persona sos y se que lo que te voy a decir no me va a justificar, pero actué así por rabia, porque también tenes que entender que me dolió por como me trataste en la mañana. Se que mi actitud fue inmadura y que no merezco que me perdones así tan fácil, pero yo te amo mi amor (la mira fijo a los ojos y le toma las manos) y no quiero que terminemos así este día; no quiero irme a dormir estando peleados y menos ahora que ya no somos solo los dos...


Angie: No lo se...


Pablo: (llorando) Angie, de verdad yo hago lo que vos me pidas con tal que me perdones mi amor... y mañana mismo delatamos a Jackie y al cómplice que tiene.


Angie: ¿Jackie? ¿Qué tiene que ver esa en todo esto?


Pablo: Jackie y Leonardo sacaron el dinero para culparte a vos... yo la escuché a ella hablando por teléfono antes de irme.


Angie: Ahh bueno, entonces gracias a eso te convenciste de que yo no había sido, osea que sino escuchas a Jackie todavía seguirías pensando que yo era una ladrona.


Pablo: Eso me hizo recapacitar de como me había comportado con vos, no para abrirme los ojos; yo nunca desconfie de vos... (Angie guarda silencio y Pablo suspira sin dejar de llorar) Bueno, sino queres hablar ahora, te entiendo... aunque me duela en el alma.


Pablo se levanta y camina en dirección a la casa, fue ahí cuando Angie se levantó y caminó rápido tras el.


Angie: ¡Pablo! (cuando este se dio vuelta ella se aproximó a él y lo besó larga y dulcemente) Esta bien... vos me has tenido paciencia y me has perdonado muchas veces, y yo no soy quien para no hacerlo.


Pablo: Por favor, no te sientas obligada hacerlo...


Angie: No lo hago por obligación, lo hago por amor... por amor a vos y a él (le toma la mano y la pone en su vientre).


Pablo: O a ella (ambos ríen).


Angie: O a ellos... según Beto van a ser mellizos.


Pablo: ¿Mellizos? ¡Ay dios mío! (pone cara de aflicción).


Angie: (riendo) Aunque no lo creo.


Después de la reconciliación se fueron a casa y a la mañana siguiente ya estaban en el Studio preparando las clases para ese día.
Angie recordó que había dejado unas partituras en el zoom así que antes de que llegara la hora de las clases, fue a buscarlas.
Estaba ahí cuando escuchó que del sótano del escenario provenían unos extraños ruidos así que dejó lo que estaba haciendo y comenzó a bajar unas angostas escaleras que conducían hacia abajo; mientras avanzaba con cuidado de pronto sintió que unos misteriosos brazos tomaban impulso y la empujaban con fuerza haciendo que rodara hasta llegar al suelo.


                                                                                                                          (Continúa...)