Capítulo 37

En el capítulo anterior...


De inmediato Pablo volvió a dormir y no sintió más a Angie; algunas horas después despertó y se dio cuenta de que ella aún no volvía así que se levantó y empezó a buscarla sin éxito.

Desesperado por saber su paradero la llamó varias veces al celular, pero ella no respondía.
Pensó que podía estar en casa de Angélica, sin embargo recordó lo que había sucedido y descartó la idea, después consideró que existía la posibilidad de que estuviera en el Studio, pero ya era de muy de madrugada.

En eso estaba cuando de pronto sonó su celular.


Pablo   : ¿Aló?


???      : ¿Usted es Pablo?


Pablo  : Si ¿por qué? ¿quién sos?


???     : Disculpe, yo soy Victor Vazquez oficial de la policía ¿Usted por casualidad es amigo o pariente de la señorita Angeles Carrará?


Pablo : (asustado) ¡Soy su esposo!  ¿Qué le pasó a Angie? ¿Dónde está?


???   : Si no sabe donde está lo más probable es que ella se haya escapado de casa, necesito que se acerque lo más pronto posible a nuestro cuartel, su mujer está detenida.


                                *******


Pablo: Que Angie está ¿qué?


???: Detenida, por ahora no puedo darle más información.


Pablo: Bueno, voy enseguida.


Apresurado salió con rumbo al cuartel, cuando llegó encontró a Angie despeinada, muy feliz y riendo con unos policías en evidente estado de borrachera.


Pablo: ¡Angie! 


Angie: (caminando y hablando con dificultad) ¡Mi amor! ¿qué haces aquí? (se le acerca, lo abraza y lo besa intensamente).


Pablo: (separándola de él) Pará, controlate un poco ¿qué haces VOS aquí?


Angie: Nada, estaba en casa con vos y de pronto ¡Pum! aparecí acá...


Pablo: (sarcástico) Si claro, y yo soy el rey de España.


Angie: (riendo a carcajadas) ¡Ay! se enojó el señorito ¿Anda sensible?


Mientras los policías contenían la risa, uno de ellos se acercó a Pablo para hablarle.


Oficial: Señor Pablo, le agradezco que haya venido.


Pablo: Tenía que hacerlo, es mi mujer ¿Me podes decir por favor por qué llegó a parar acá?


Angie: (interrumpiendo y poniendo los ojos en blanco) Ya te dije que aparecí acá por arte de magia ¿acaso no le crees a tu esposa?


Pablo: ¡Vos te callas! Suficiente susto me diste al desaparecer.


Oficial: Creo que es mejor que hablemos en mi oficina.


Angie: ¡Huy! En su oficina... ¡Cuidadito eh! No vayas a intentar quitarme a mi esposo, ya hay varias dando vuelta y me son más que suficiente.


Pablo: Perdonala... Y vos (mirando a Angie) te quedas aquí, no te moves a ningún lado ¿entendido?


Angie: ¡Si, mi capitán! (soltando una carcajada).


*******


Pablo: De verdad te pido las disculpas pertinentes, ni yo en todo los años que la conozco la había visto en ese estado.


Oficial: No se preocupe, acá llegan muchas personas todas las noches en la misma situación.


Pablo: ¿Me podes decir dónde estaba? ¿Por qué la detuvieron? En medio de la noche se levantó, me dijo que iba en busca de un vaso de leche, después desperté, no estaba y me llamas vos diciendo que está detenida...


Oficial: (riendo) Un poco larga la ida a buscar la leche. Bueno, nosotros fuimos avisados por alguien de que su esposa se encontraba bailando, bebiendo y haciendo mucho desorden arriba de unas mesas en un bar cercano.


Pablo: (sorprendido) ¿Desorden arriba de unas mesas?


Oficial: Exactamente, aunque le cueste creerlo.


Pablo: No, si es cosa de verla y darse de cuenta de que no es nada imposible que lo haya hecho.


Oficial: El asunto se le estaba escapando de las manos al dueño del local y además en el momento en que llegamos, ella se resistía a ser detenida, usted debe entendernos, solo cumplimos con nuestra labor.


Pablo: Lo se y les agradezco haberla traído hasta acá. Y ahora ¿cuándo la dan en libertad?


Oficial: Bueno, por no ser tan grave la infracción y por haber actuado bajo la influencia del alcohol se la puede llevar ahora mismo después de firma un par de documentos.


Después de firmar se despidió del policía y salió a buscar a Angie a la sala donde la tenían.


Angie: (riendo y hablando con algunos policías) Y actuaba frío conmigo, me ignoraba el muy tarado, se hacía el difícil, el interesante, de hecho andaba con otra, con una fea que ahora resultó ser prima mía y después cuando supo que yo me iba a Europa lloraba y me hacía pucheros como un nenito ¡Ay que no te vayas! ¡Siempre te amé! (estalla en risa nuevamente mientras el resto la mira raro).


Pablo: (apareciendo por detrás de ella) ¿Hablabas de mí? 


Angie: (sin parar de reír) ¡No! ¡del rey de España!


Pablo: (suspirando) Ya basta, toma tu cartera y nos vamos.


Angie: ¿Nos vamos?


Pablo: ¡Obvio! ¿O te pensas quedar aquí toda la noche, borracha y haciendo el ridículo? 


Angie: ¡Si!


Pablo: ¡No! Nos vamos ahora mismo.


Finalmente después de haber logrado que Angie dentro de su borrachera decidiera volver a casa, tuvo que esperar a que ella se despidiera de abrazo y les pidiera el celular a todos los policías que ahí estaban.


Angie: (hablando, tomando sus cosas y dirigiéndose a la salida apoyándose en el hombro de Pablo) ¡Adiós muñecos! ¡Olvidenme!



Luego de eso la tomó y con mucho esfuerzo se la llevó al auto.


Angie: ¿Las llaves de mi auto?


Pablo: ¿Para qué las queres?


Angie: Para prepararme un helado fijate...


Pablo: Estás loca si pensas que te voy a dejar conducir.


Angie: ¿Y desde cuándo me mandas vos si se puede saber?


Pablo: Desde que te escapaste a medianoche de la casa y te fuiste de juerga como si fueras una adolescente, terminando detenida por la policía ¡desde ese momento! ¿O te parece muy adecuada tu actitud siendo una mujer casada?


Angie: ¡Envidia! envidia porque vos ya no estás para salir de fiesta, porque ya estás medio pasadito en la edad.


Pablo: ¿Acaso no entendes amor? ¡Te tenes que cuidar!


Angie: ¿Cuidar para qué? ¡Si ya no estoy embarazada! ¡No estoy esperando ningún hijo tuyo! ¡Porque se murió mi bebé! (pasando rápidamente de la euforia al llanto desconsolado) ¡Es inaceptable que te molestes hasta porque quiero ahogar mis penas!


Pablo: Seguramente yo estoy muy feliz con todo lo que nos ha pasado... ¿Angie? (mira hacia el lado y se da cuenta de que se había quedado dormida).


Llegando a casa la bañó con agua fría, le dio algo caliente y la metió en la cama hasta el día siguiente.


Pablo: ¡Hola, hola! ¡Buen día señora Ángeles! (golpeando las palmas y abriendo rápidamente las cortinas).


Angie: (despertando muy molesta) ¿Qué haces tarado? ¡Cerra la cortina que me llega todo el sol y la cabeza ya me va a explotar!


Pablo: Ahh bueno... ¡Pero que mal agradecida que sos! Yo interrumpiendo MI sueño porque la reina se escapa de casa a MEDIANOCHE, después me llaman del cuartel de POLICÍAS diciendo que estabas detenida por BORRACHA y por hacer DESORDEN y yo como siempre haciéndome cargo y solucionando TUS problemas y ahora en vez de darme las gracias me... (la queda mirando y nota que ella lo imitaba y se burlaba de él mientras hablaba) Y falta de respeto además la... (vuelve a ser interrumpido, ahora por una almohada voladora que le llegó justo en la cara).


Angie: (entre risas) ¡Callate la boca!


Pablo: ¡Ahh no! ¡Esto ya es más que suficiente! ¿Querés que me calle? Entonces... callame vos (riendo se le tira encima y cuando ya estaban a punto de besarse suena el celular de Pablo) ¿Aló? 


???: Venite lo antes posible al Studio, la institución está corriendo un grave peligro y solo vos y tu mujer pueden impedirlo.


Pablo: (asustado) ¿Pero qué pasa? ¿Quién sos vos?


???: ¡Deja de hacer tantas preguntas y andá al Studio antes de que sea demasiado tarde!


                                                                                           (Continúa...)