Novela Pangie

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sábado, 27 de septiembre de 2014

Capítulo 41



En el capítulo anterior...


Después de salir felices del médico, se dispusieron a tomar el carro para volver a casa y en ese camino iban cuando se encontraron en uno de los pasillos con...


Germán: ¡Angie! 


Angie: (sorprendida e incómoda) ¿Germán? ¿Qué hace acá?


Germán: Angie, ya no tiene caso... pensé que ya estabas en la semanas de los primeros estudios y vine a saber como fue todo ¿cómo está mi futuro hijo?


                               ******* 

Busca el desafío al final del capítulo :)

Pablo: (sorprendido) Tu ¿qué?


Germán: ¡Mi hijo! Lo siento Angie... ya no podemos seguir ocultándolo.


Angie: ¿Qué? ¿Podes venir un poco? 


Toma del brazo a Germán y lo aparta para hablar a solas, pero antes de que empezara a hablar...


Pablo: ¡Ahh no! Esto no lo aguanto... (tomó su bolso y entre tristeza y desconcierto salió del pasillo dando un fuerte portazo).


Angie: ¡Pablo! ¡No te vayas!


Germán: (deteniéndola) Dejalo ir, Angie... ya no tiene sentido.


Angie: Y a vos ¿qué m&erd# te pasa? ¡Sos un completo idiota! (no se contiene y le da una bofetada haciéndole sangrar la boca).


Germán: ¿No sabes lo que me pasa? ¿Ya lo olvidaste? ¿Tan rápido?


Angie: (gritando) ¡¿Qué tendría que recordar?! ¡¿Qué?!


Germán: La noche... la noche en que llegaste borracha a mi casa suplicándome que te hiciera mi mujer, que Pablo no te llenaba, que nunca habías dejado de sentir cosas por mí... ¿te refresqué la memoria? ¿me vas a seguir negando mi derecho de padre?


Angie: ¡No! ¡No es verdad! ¡No mientas!


Germán: ¡No miento! ¡Es verdad! ¿O acaso querés que te de otro recordatorio? (la abraza fuerte e intenta besarla, pero Angie lo empuja al suelo). 


Angie: ¡Pará tarado! Eso no es... no puede ser verdad... es imposible.. (toma sus cosas y se va).


Por Angie:


Salí de la clínica, pero ya ni el carro ni Pablo están... ¡No puede ser! Yo nunca le haría eso a Pablo, ni por más inconsciente que estuviera... ¿o sí? ¡No! ¡Me niego a creerlo! pero si yo esa noche... no recuerdo nada... ¡No puede ser! ¡No pude haber sido tan idiota! Yo a Pablo lo amo y a Germán... necesito verlo, necesito que me escuche, pero... si fue asi... no me lo perdonaría nunca.


Después de un rato llamó a Luna para que la pasara a buscar en el auto.


Luna: ¿De verdad no te acordas que hiciste esa noche?


Angie: ¡No! Osea si... osea recuerdo que estaba triste, que salí a beber, después nosé...


Luna: Pero tenes que hacer memoria, son tus hijos, es tú matrimonio, es recuperar a Pablo o perderlo para siempre...


Angie: (llorando) ¡Es que no recuerdo nada! ¡NADA! Necesito ver a Pablo y decirle que...


Luna: (interrumpiéndola) Decirle ¿qué? ¿Que estabas tan borracha que no te acordas si te acostaste o no con Germán? ¿Que los bebés que esperás pueden ser tanto de él como de Germán? ¿Eso?


Angie: ¡No! pero... ¿Qué hago? ¡Decime que hago! ¡Estoy desesperada! (llora desconsoladamente).


Luna: ADN.. ¡Ya está! ¡Un test de ADN! Así salis de la duda lo antes posible y paramos con la incertidumbre.


Angie: ¿Pero con qué?


Luna: Con algo de Pablo... con su pelo...


Angie: ¡Ya está! Vayamos a la casa, en sus cosas puede que encontremos algo o a él mismo y volvemos directo a la clínica, tengo que terminar con esto hoy mismo.


Al entrar a casa no encontraron a Pablo, pero si sus pertenencias, entre ellas su peine y guardándolo en una bolsa lo llevaron como muestra al laboratorio.


Secretaria: Claro, no hay problema... y bueno tendría que venir a buscar los resultados de los estudios en dos semanas más...


Angie: (interrumpiendo) ¡Dos semanas! ¡Yo necesito los resultados AHORA! ¡Hoy mismo!


Luna: ¿No podría ser un poco antes?


Angie: ¿Un POCO antes? ¿Qué parte de URGENTE no entendes, TARADA? (insultando a la secretaria).


Secretaria: Señora, porfavor trate de calmarse, estos son los plazos de entrega, yo no puedo hacer nada...


Angie: ¡VOS no podes hacer nada, pero yo SI! 


Sin pedir permiso entró a la oficina del director y después de un rato logró que le entregaran los resultados al día siguiente, Volvieron a casa, Pablo no estaba y tampoco llegó durante la noche sin responder llamadas ni mensajes.
A la mañana siguiente Luna la volvió a acompañar y llegaron juntas al laboratorio, de inmediato les entregaron el sobre, el que Angie con miedo y nervios abrió lentamente.


Luna: ¿Y? ¡Hablá mujer! ¿Quién es el padre?


Angie: (suspirando) Pablo... salió un 99% de compatibilidad... ¿Y el otro 1%?


Luna: El otro 1% es de Germán 


Angie: ¡¿Qué?! ¡Cállate tarada!


Luna: (riendo) Tranquila, es un chiste... y ya está, tus hijos son de Pablo y ahora...

No olvides buscar el desafío Angie: Ahora él tiene que ver los resultados, sino lo pierdo...


Luna: No esperemos más.


Ambas salieron rápido, tomaron el auto y cuando ya habían avanzado varias cuadras divisaron a Pablo caminando cabizbajo, Angie se bajó a correr detrás de él y a llamarlo fuerte, pero al parecer la tristeza lo había ensordecido; el semáforo cambió de luz y Pablo atravesó sin darse cuenta que desde un costado venía un auto negro a toda velocidad que de un momento a otro se fue sobre él atropellándolo y dejándolo sangrando sobre el pavimento. 


                                                            (Continúa...)
                                                  Desafío más abajo




DESAFÍO: SI LLEGAMOS A LAS 100 VISITAS EN UNA SEMANA (HASTA EL 4 DE OCTUBRE) SUBO CAPÍTULO 42 Y 43 EL MISMO DÍA. DIFUNDE Y COMPARTE EN FACEBOOK Y TWITTER  MI NOVELA PARA LLEGAR A LA META. BESITOS.. NATALIA.












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